El 25 de mayo de 1910 se cumplió el Centenario de la Revolución de Mayo. Debido a este gran acontecimiento se decidió festejarlo invitando a notables de diferentes nacionalidades y organizando todo tipo de eventos tales como ceremonias civiles y religiosas, desfiles militares, congresos, banquetes, funciones de gala, entre otros. También se acercaron a nuestro país poetas y literatos, viajeros profesionales e invitados especiales que dejaron noticia de ese año excepcional.
Pero no todo lo relacionado con esta fecha era alegría: durante la Semana de Mayo de 1910 se podía apreciar un fuerte descontento representado por protestas sociales (por ejemplo, el atentado que sufrió el Teatro Colón en una de sus funciones de Gala, amenazas de huelga general y planteamientos violentos de sectores sindicales anarquistas y socialistas); utilizando la presión policial y el Estado de Sitio estas amenazas fueron neutralizadas).
La Argentina, que se perfilaba como una potencia semejante a Estados Unidos mostraba dos caras distintas en este festejo: la magnificencia del mismo por un lado y la tensión social, por el otro.
Pero no todo lo relacionado con esta fecha era alegría: durante la Semana de Mayo de 1910 se podía apreciar un fuerte descontento representado por protestas sociales (por ejemplo, el atentado que sufrió el Teatro Colón en una de sus funciones de Gala, amenazas de huelga general y planteamientos violentos de sectores sindicales anarquistas y socialistas); utilizando la presión policial y el Estado de Sitio estas amenazas fueron neutralizadas).
La Argentina, que se perfilaba como una potencia semejante a Estados Unidos mostraba dos caras distintas en este festejo: la magnificencia del mismo por un lado y la tensión social, por el otro.
DAMIAN MACHACA Y TOMÁS CARDONA